¿Los cachorros extrañan a sus mamás?

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¿Te ha tocado llevar a un cachorro nuevo a casa? La primera noche siempre lloran mucho porque extrañan a su mamá, a sus hermanos y el lugar donde nacieron. Esto es perfectamente normal, los cachorros están en un lugar que no conocen, que no huele igual, sin el calor de su mamá y con una nueva familia que está igual de nerviosa que ellos.

La edad ideal para separar a un cachorro de su mamá son 8 semanas de nacido como mínimo. Antes de ese tiempo, los cachorros aún están aprendiendo cosas de su mamá, tomando leche y conviviendo con sus hermanos. Estos aprendizajes serán vitales para el resto de sus vidas. Los cachorros que son separados de sus mamás antes de las 8 semanas tienden a ser más nerviosos y menos sociables. De hecho, entre más tiempo se puedan quedar con su camada y su mamá mejor, sin embargo, esto no significa que los perros tendrán que estar siempre con sus mamás para ser felices. 

Los perros, como muchos otros mamíferos (pero no como los humanos ni los primates) no necesitan estar cerca de sus padres hasta que son jóvenes adultos o adultos. Los animales normalmente se separan de sus padres cuando ya pueden valerse por si mismos y en el caso de los perros, a las 8 semanas ya se pueden mover solos, pueden comer y pueden controlar esfínteres por lo cual están listos para lo que sigue en sus vidas.

Toma en cuenta si tienes un cachorro nuevo en casa, que a pesar de que ya está listo por su edad, esto no quiere decir que no tendrá un par de días en los que extrañe el calor y olor de su primer hogar. A fin de cuentas, fueron separados de su mamá.

Así que sé considerado con él, no lo regañes si llora, incluso puedes llevarlo al cuarto o a la cama contigo por las primeras noches para que se acostumbre a tu olor, a tu voz, pueda sentir el latido de tu corazón y genere más rápido un vínculo con su nueva familia.

Antes de llevarte a tu cachorro nuevo a casa, lleva una cobijita o un peluche para que lo pongan donde están los cachorros y la mamá y se impregne de sus olores. Así cuando esté en casa, le puedes poner la cobija o el osito para que se sienta cerca de mamá. También en las noches, si decides no llevarlo contigo a la cama, puedes amarrar una botella con agua tibia con la cobija y ponérsela en el lugar donde dormirá, así puede sentir calorcito y el olor de mamá y eso le ayudará a no extrañar tanto. 

No te preocupes, en cuanto tu perro aprenda a reconocer tu olor y tu voz y sepa que tú eres su dueño ya habrá creado los lazos que los harán inseparables para siempre. Esto toma muy poco tiempo así que no te sientas mal si las primeras noches llora por que extraña a su mamá, mímalo mucho y todo estará bien.

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